Un legado que se bebe

En Tlacochahuaya, Oaxaca, nuestra bisabuela preparaba un chocolate único como muestra de amor.

Hoy, seguimos esa tradición con cacao criollo, molido y tostado artesanalmente para preservar su esencia.

Cada barra es más que chocolate: es un abrazo de Oaxaca para todo México.

Conoce nuestra historia